Los conflictos y los desastres como los terremotos, las inundaciones o las sequías causan cada año el sufrimiento y la perdida de vidas y enseres a miles de personas en todo el mundo. Intermón Oxfam estamos presentes en África y Latinoamérica atendiendo a las personas vulnerables en las crisis humanitarias. Aquí explicamos qué hacemos en los países afectados para atender las necesidades básicas y reducir la vulnerabilidad de las personas ante futuras crisis.

jueves, 30 de septiembre de 2010

Inundaciones en Pakistán: Por qué el jabón es uno de los primeros productos en ser distribuido


Durante las devastadoras inundaciones que asolaron Pakistán, las personas no tuvieron apenas tiempo de salir de sus casas con sus hijos; mucho menos de salvar sus pertenencias o algunos productos básicos para la vida diaria.

"El agua llegó muy rápido. Sólo pudimos salvarnos a nosotros mismos y a nuestros hijos. También algo de ropa… pero no nos dio tiempo ni siquiera a salvar la vajilla u otras cosas” explica Razia, madre de dos niños, Arbeli de cuatro años y Nadia de uno.

Ahora, a Razia le preocupa la salud de sus hijos. Tras hablar sobre el futuro, nos cuenta qué es lo que necesitan ahora. “Necesitamos jabón para lavar la ropa. La ropa de los niños se ensucia mucho y hay un montón de moscas… todos los días hay un montón de moscas alrededor de los niños. Me preocupa su salud”.

Las personas que viven en los cada vez más numerosos campos nos informan del gran número de enfermedades que están apareciendo, especialmente la diarrea. “Los niños padecen un montón de enfermedades cutáneas debido al agua, fiebre y diarrea”.

Todos los padres expresan su preocupación por sus hijos y los problemas que encuentran a la hora de mantenerse limpios.

Una de las primeras cosas que piden es jabón

Oxfam ha distribuido kits de higiene a más de 57.000 familias en la provincia de Sindh, ayudando así a unas 400.000 personas. Un día antes de distribuir los kits, el equipo registra el número de personas que viven en el campo y les entrega unas fichas que luego intercambian por los kits. Así se aseguran de que son las personas afectadas por las inundaciones quienes reciben los kits de higiene.

Otra madre, Sakina, nos explica: "Ahora mismo limpio las ollas con agua y ceniza porque no tenemos jabón. Preferiría usar jabón – es mejor para lavar, pero cuando tuvimos que dejar nuestras casas no tuvimos tiempo de coger muchas cosas, sólo algunas ollas. Ahora ni siquiera tenemos jabón para lavar la ropa… así es difícil mantener las cosas limpias, de manera que estoy muy contenta de que vayamos a recibir jabón y otras cosas de Oxfam”.

Efectivo y barato

Cada kit de higiene contiene 15 pastillas de jabón para uso personal y varias pastillas de jabón para lavar la ropa.

Así que si te preguntabas por qué Oxfam, ante toda esta devastación, está distribuyendo jabón… quizás esto lo explique:

Lavarse las manos con jabón es una de las formas más efectivas y baratas de prevenir enfermedades diarreicas y la neumonía, responsables de la muerte de más de tres millones y medio de niños menores de cinco años cada año. Basándonos en estudios recientes, lavarse las manos con jabón puede reducir el riesgo de contraer enfermedades diarreicas entre un 42 y un 47%, y, así, acciones formativas para concienciar sobre la importancia de lavarse las manos con jabón pueden salvar millones de vidas.

Durante una situación de emergencia, unas simples pastillas de jabón para lavarse las manos y el cuerpo o lavar la ropa mantienen a las personas sanas y les ayuda a recuperar su dignidad.
Leer más...

Alerta rápida para la protección de civiles

Nuestros compañeros y compañeras de Oxfam Australia organizan un encuentro sobre Acción Humanitaria y protección de civiles en Camboya..

Esta es la información resumida del evento:

Alerta rápida para la protección:
Tecnologías y prácticas para la prevención de las atrocidades y delitos masivos

3-4 noviembre, 2010
Phnom Penh Hotel, 53 Boulevard Monivong, Phnom Penh, Camboya

La conferencia explorará una serie de cuestiones.

- ¿Cuál es el papel de las nuevas tecnologías en materia de alerta rápida de los conflictos y cómo interactuar con los sistemas de vigilancia más tradicionales?
- ¿Cómo podemos aprovechar, coordinar y utilizar la cantidad a veces abrumadora de información disponible?
- ¿Qué sistemas y mecanismos se pueden poner en marcha para asegurar una alerta rápida cuando se da?
-¿Cómo funciona el sector humanitario eficazmente con las comunidades en riesgo una vez la alerta ha sonado?
-¿Cómo puede un cambio de actitud y comportamiento político hacer descender la violencia?

Toda la información en la web de Oxfam Australia
. Leer más...

Sur de Sudán: mitigando el hambre en Gogrial Oriental


"Hemos pasado hambre debido a la sequía. Espero que la diversificación de nuestras fuentes de alimentos nos ayude a enfrentar una nueva sequía sin hambre", Justin Madut, agricultor (32) que vive en la aldea de Malual Kuel, en el estado de Warrap, sur de Sudán.

La familia de Justin y Abang es una de las 2.235 beneficiarias del programa de seguridad alimentaria de Intermón Oxfam, iniciado en abril de 2010 que incluye la distribución de semillas y de herramientas. Al igual que muchas otras familias del condado de Gogrial Oriental, se vieron gravemente afectadas por la sequía de 2009, que duró seis meses. Justin, Abang y sus cinco hijos e hijas sólo comía una vez al día durante esa época. E incluso, tuvieron que vender sus animales para poder alimentarse.

"El equipo de Intermón Oxfam no sólo nos ayudó con las semillas y las herramientas, sino que también nos capacitaron para mejorar nuestras prácticas agrícolas", nos explicó Justin.

Al igual que otras 11 comunidades beneficiarias, Justin y su gente está expandiendo su actividad agrícola a diferentes cultivos como el sorgo, el maní (cachuete), la yuca y una variedad de verduras.

El proyecto también promueve entre las mujeres la producción de vegetales. Al menos 30 mujeres en diez aldeas han recibido formación para el cultivo de hortalizas. Reciben seis variedades de hortalizas y herramientas de cultivo.

El campesinado de estas zonas siempre había utilizado el sistema de agricultura convencional. Cultivan la tierra usando un simple pedazo de metal afilado llamado "pur", y por eso se toman mucho tiempo y esfuerzos para cultivar una pequeña porción de tierra. Intermón Oxfam está trabajando para mejorar esta situación mediante la entrega de arados de bueyes.

Peter Patrick Opio, oficial de Seguridad Alimentaria de Intermón Oxfam, nos cuenta que con el entrenamiento apropiado y el seguimiento de las actividades junto a los/as beneficiarios/as, el aumento en la producción de alimentos y en los ingresos es realmente posible.

"Hay un montón de obras por hacer junto con la comunidad. Acabar con la inseguridad alimentaria exige un enfoque global y multisectorial basado en las necesidades de todas las personas involucradas. Veo que los aldeanos y aldeanas se esfuerzan por seguir las prácticas agrícolas recomendadas. Espero que con el tiempo las personas que han sido formadas puedan transmitir su conocimiento a más y más personas”, comentó Opio.


Por Abdullah Ampilan, oficial de salud pública en Luyonkayer, sur de Sudán.


Nota: Este proyecto cuenta con el apoyo de ECHO, BSF y todas las personas que hacen un donativo a esta emergencia.

¡ Haz un donativo ahora!



Leer más...

lunes, 27 de septiembre de 2010

Agua potable para las comunidades remotas del sur de Sudán

“Estoy acostumbrada a luchar. Si no hubiese luchado, mi familia no hubiera tenido qué beber” cuenta Arek Mondeng, una ‘vieja’ niña de 13 años del sur de Sudán cuando le preguntamos sobre su experiencia al tener que ir a traer agua de otros pueblos.

Su pueblo del oeste de Toch, área del Gogrial oriental, en el estado de Warrap, está situado en un área alejada, donde el acceso al agua potable era un problema. Cuando la única bomba de agua manual de su comunidad se rompió, las personas se vieron obligadas a ir en busca de agua a otros pueblos vecinos, que están a más de una hora de camino.

Foto: Técnicos Oxfam reparan una bomba de agua dañada en Patuon. (c) Intermón Oxfam.

Los habitantes del pueblo de Arek, la mayoría mujeres y niñas como ella, solían luchar para ser las primeras en poder traer agua de la única fuente manual que existía. Y es que las comunidades vecinas generalmente prefieren que sus miembros se sirvan primero antes que las personas de otros pueblos llenen sus cubos. Esta situación calentaba el ambiente y generaba muchos conflictos en los puntos de agua, acabando inevitablemente en un gran alboroto.

“Hoy ya no tengo necesidad de pelear para conseguir agua para mi familia. La bomba de agua manual de mi comunidad ha sido reparada. Y eso me permite ir a clases con más regularidad”, nos cuenta Arek. La bomba manual del pueblo de Chur es una de las 14 bombas de agua manuales reparadas. En total, el equipo Intermón Oxfam de Agua y Saneamiento en sur de Sudán tiene previsto arreglar 64 bombas en al menos 60 comunidades alejadas más del estado de Warrap.

En el pueblo de Jarmou -en el este de Toch- las mujeres no tienen otra alternativa, cuando las bombas de agua están dañadas, de coger agua directamente del río o de los estanques, los cuales están muchas veces contaminados a causa de las crecidas. Las madres se quejan que sus hijos tienen diarreas frecuentemente cuando beben agua de estas fuentes.

Además del tormento que supone soportar largas caminatas, coger diarrea, y tener que luchar en los puestos de agua, las mujeres se enfrentan en el monte a otros peligros en su búsqueda por el agua potable. Tanto mujeres como niñas, encargadas tradicionalmente de traer agua a sus hogares, temen por su seguridad mientras caminan por el bosque.

Awut Majok, madre de seis hijos, dice que se siente feliz por ser miembro del Comité de Gestión del Agua de su comunidad en Jarmou. “Gracias a la formación que recibimos, podemos cuidar de nuestras bombas de agua y repararlas cuando se estropean”, revela Awut.

“La mayoría de los comités de gestión del agua a nivel local ya no funcionaban. Estamos reactivando estas estructuras y dotándolas de las competencias necesarias para que puedan ser autosuficientes y gestionar sus puntos de agua de forma autónoma”, explica Evarest Ochola, oficial de Agua y Saneamiento de Intermón Oxfam.

Foto: Evarest Ochola (con camiseta Oxfam) discute con el jefe del pueblo de Warabiei el proceso de reparación de las bombas manuales de agua. (c) Abdullah Ampilan/ Intermón Oxfam

Según Evarest, además de las reparaciones de las bombas existentes, Intermón Oxfam tiene previsto perforar 15 nuevos puntos de agua en pueblos especialmente vulnerables. Intermón Oxfam está trabajando estrechamente con el Departamento de Abastecimiento de Agua Rural y Saneamiento (RWSSD en inglés) del gobierno para retomar los principales problemas relacionados con el acceso al agua potable.

Oliver Mou, director del RWSSD, afirma que la intervención de Intermón Oxfam es de gran ayuda al trabajo desarrollado por el departamento para salvar brechas y solucionar las principales cuestiones relacionadas con el agua en la región. Él cree que, poco a poco, los graves problemas de agua se solucionarán a medida que el gobierno y las ONG colaboren y complementen sus actividades.

Durante su visita a terreno, la directora de Intermón Oxfam en sur de Sudán, Sara Karimbhoy, ha apreciado los esfuerzos del equipo de Agua y Saneamiento que está trabajando en esas comunidades tan remotas y de difícil acceso para acercar el agua potable a esas personas. Según sus palabras, el agua es elemento indispensable para preservar la salud y mejorar las condiciones de vida de las personas.


Por Abdullah Ampilan, oficial de salud pública en Luyonkayer, sur de Sudán.


Nota: Este proyecto cuenta con el apoyo de ECHO, BSF y todas las personas que hacen un donativo a esta emergencia.

¡ Haz un donativo ahora!



Leer más...

miércoles, 1 de septiembre de 2010

Inundaciones en Pakistán: Llevando ayuda a pie al Alto Valle del Swat


La gente del Alto Valle del Swat ha estado viviendo una pesadilla desde que las inundaciones empezaron. Han estado casi completamente aislados del resto del país. Para cientos de miles de personas, los helicópteros han sido la única vía de ayuda desde que las aguas empezaron a subir.


Lo que más me preocupa como trabajador de Oxfam es la escasez crónica de agua potable en muchos de estos lugares. Peor aún, muchas personas están tan desesperadas que beben agua del río: las tuberías que normalmente les traían agua fresca desde los manantiales han sido arrancadas por las inundaciones.

Pero el agua del río no está limpia y estamos preocupados por posibles brotes de enfermedades. Hemos escuchado de personas que están sufriendo diarreas cada vez más a menudo.

Recién tras dos semanas y media desde que empezaron las inundaciones, las aguas han empezado a retroceder en Swat. Hemos decidido que este es el momento para intentar ir y ver con nuestros propios ojos la situación en terreno.

Camino a Bahrain
El equipo, conformado por mí y otros cinco compañeros, comienza el viaje en Mangora en el Bajo Swat con el objetivo de llegar a la ciudad de Bahrain, una ciudad del Alto Swat. El camino ha estado cortado por semanas y sólo es accesible a pie.

Llevamos con nosotros 100.000 bolsitas de polvos purificadores de agua, empacadas en 400 pequeñas cajas. Cada bolsita puede purificar 10 litros de agua en sólo 20 minutos. Esto hace la diferencia entre un niño o niña enferma y uno sano.

Partimos desde Mangora a las 9 de la mañana en coche. Aún llovía muy fuerte. Como pakistaní, nunca he visto unas lluvias como éstas en mi vida. Un viejo hombre del pueblo nos dice que recuerda una gran inundación en 1929, pero que nada se comparaba con esto. Esto es único en la historia de mi nación.

Una hora y media más tarde, sólo hemos logrado llegar al pueblo de Fatehpur, donde nos cuentan que carreteras y puentes que están más adelante, están destruidos. Tenemos que dejar el coche e irnos a pie. Contrato a ocho trabajadores para que nos ayuden a llevar nuestras cajas.

Mientras caminamos, no puedo dejar de mirar las casas, hoteles y tiendas alrededor mío. Son edificios de concreto que han colapsado como si hubiesen estado hechos de papel. Es difícil de creer que sólo el agua puede causar toda esta destrucción y miseria.

Fangoso y resbaladizo
Tras caminar por una hora y media, nos detenemos en el camino y alquilamos otra camioneta. Esta vez, alcanzamos a llegar al pueblo de Jarri donde otro puente ha colapsado y debemos volver a caminar a pie.

Ahora nuestra caminata es más difícil ya que la pista está fangosa y resbaladiza. Intentamos llegar al pequeño pueblo de Madain, donde por tercera y última vez en este día, debemos buscar otro vehículo. Pero sólo logramos andar dos o tres minutos antes que otro puente colapsado nos detenga en nuestro camino.

No estamos solos en nuestro viaje. Nos detenemos y conversamos con algunos hombres. La mayoría de ellos viene de lejanas partes del Alto Swat y han caminado como mínimo un día. Han ido hacia Fatehpur a recoger alimentos entregados por organismos de ayuda. Para la mayoría, ésta será la única comida a la que tendrán acceso durante varios días. Van cargados de sacos de harina, aceite, arroz, legumbres, azúcar, sal y galletas, que llevan sobre sus espaldas, lo que será suficiente para mantener a sus familias por una semana o más.

Hay dos mujeres también, recogiendo agua del río para sus familias. Saben que no deberían beberla. Que podría poner a sus hijas e hijos enfermos. Pero no tienen otra elección.

Estas personas no tienen dónde ir. La gente del Swat es muy pobre y no pueden darse el lujo de irse a otro lugar y arrendar una casa. Y no quieren dejar sus hogares ni su ganado. Las personas más afortunadas tienen familiares con quienes pueden quedarse, pero cada vez es más difícil encontrar personas que no hayan sido afectadas por las inundaciones.

Cruzando puentes improvisados
Comienza a llover más fuerte, forzándonos a caminar más lento. Es difícil mantener el paso si estás lleno de lodo. Estamos luchando por avanzar, pero nadie se queja.

Hay momentos aterradores también. Porque muchos puentes han sido completamente barridos por el agua y las personas locales han improvisado soluciones con lo que tienen a mano. Hemos cruzado numerosos puentes que están hechos con trozos de maderas anudados entre sí con cuerdas. Son un poco peligrosos.

Cruzo sosteniéndome con fuerza mientras el puente se sacude lado a lado. Lo que más me preocupa es mi equipo. Llevo a cinco personas de Oxfam conmigo más los trabajadores que he contratado en el camino.

Finalmente, tras unas cuatro horas de dura caminata, llegamos a Bahrain a las 4 de la tarde. Estamos cansados y mojados, pero sabemos que ha valido la pena. Gestionamos la distribución de las bolsitas purificadoras a cerca de 3.000 hogares. Con 30 bolsitas, cada familia podrá tener agua potable por 15 días. Volveremos de nuevo hoy y todas las veces que sea necesario. Necesitamos trabajar juntos para ayudar donde más se necesita.

Qasim Berech, 30, es experto en salud pública de Oxfam en Pakistán. Ha viajado al Alto Valle del Swat el pasado 16 de agosto.
Leer más...